EDICIÓN NÚMERO 309 MAYO 2024

Es la época de balances y proyecciones y la Direcon no está exenta de aquello. Es bueno echar una mirada a lo que fue el 2015 en materia de acuerdos comerciales. La verdad es que si revisamos lo realizado, no fue un año muy fructífero. El único acuerdo que entró en vigencia fue el firmado con Tailandia. El muy nombrado TPP (TransPacific Partnership), se mencionó bastante y se cerró en octubre pasado, y se debiera firmar el próximo 4 de febrero en Auckland.

Dentro de las tareas de la Cancillería para este año, están:

1. Retomar las negociaciones de un TLC con Indonesia. Se efectuó una primera Ronda de Negociación, pero hubo un cambio de gobierno en dicho país el año pasado.

2. Emprender negociaciones para lograr un TLC con Filipinas. En este primer semestre debería anunciarse el inicio del proceso.

3. Continuar realizando gestiones ante la Comisión Euroasiática para negociar un acuerdo comercial con Rusia.

4. Emprender negociaciones con República Dominicana para alcanzar un TLC. Es el único país de la zona centroamericana con el cual no tenemos un acuerdo comercial suscrito.

Asimismo, se pretende revisar el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea, ya que hace más de una década que no se profundiza. A Chile le interesa incorporar al Acuerdo ciertos productos que se encuentran en lista de excepciones: merluzas, aceite de oliva, además de ampliar las cuotas anuales negociadas para carnes de aves, cerdos y vacunos y eliminar ciertos derechos específicos para algunos productos del sector agroindustrial.

Otra tarea pendiente es firmar oficialmente la ampliación del Acuerdo de Alcance Parcial con India. El proceso de negociación se cerró hace casi dos años, pero ha sido imposible lograr la firma de esta ampliación hasta la fecha. De lograrse lo anterior, se incorporarían al Acuerdo alrededor de 2.800 productos nuevos con preferencias arancelarias importantes.

Finalmente y más cerca de nuestro vecindario, este año se debiesen introducir importantes cambios al actual acuerdo con Mercosur, en especial en lo relativo a la nomenclatura con que se administra. Actualmente está en NALADISA 1993 y la idea es migrar a NALADISA 2012, lo que simplificaría mucho la confección y emisión de certificados de origen y la correlación de las partidas arancelarias.