A contar del 1 de enero de 2017 entrará en vigencia la Sexta Recomendación de Enmienda al Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías, nomenclatura que será aplicable –según el calendario que fije cada país– para clasificar las mercancías que se importen o exporten en todos los países que forman parte de la OMC.

Este nuevo Arancel Aduanero es el resultado de un trabajo de años liderado por el Consejo de Cooperación Aduanera, instancia perteneciente a la Organización Mundial de Aduanas (OMA), y que fue aprobado con fecha 27 de junio del 2014. Asimismo la OMA aprobó la Versión Única en Español del Sistema Armonizado (VUESA 2017), obtenida en la XIV Sesión del Comité Iberoamericano de Nomenclatura que, con la finalidad de incorporar la Sexta Enmienda, fue convocada por el Convenio Multilateral sobre Cooperación y Asistencia Mutua entre las Direcciones Nacionales de las Aduanas de América Latina, España y Portugal, realizado en Viña del Mar el 20.11.2015. Todos estos cambios y recomendaciones fueron oficializados y adoptados por Chile a través del Decreto de Hacienda 1281 del 06.10.2016.

La nueva codificación recoge diversas inquietudes propuestas por varias organizaciones gubernamentales y asimila también algunos cambios tecnológicos que obligan a adaptar el Sistema Armonizado a los nuevos requerimientos. Respecto de los cambios, existen adiciones, modificaciones y eliminaciones de partidas arancelarias al Arancel Aduanero. De hecho, los códigos relacionados con maquinarias, equipamientos y tecnología son los que más sufren modificaciones.

A modo de ejemplo, esta Sexta Enmienda elimina por obsoleta, la codificación que les correspondía a las máquinas de escribir.

Las modificaciones en referencia también obligaron a Aduanas a publicar la correlación de posiciones arancelarias que favorecen la liberación de derechos al rubro de la computación y que fueron adoptadas por Chile con motivo del TLC Chile-Canadá. A través del Oficio Circular 461 del 24.11.2016, el Servicio de Aduanas oficializa las diversas correlaciones o equivalencias entre el antiguo arancel y la Sexta Enmienda.

Los cambios al arancel obligarán tanto a Aduanas como a los usuarios a modificar sus sistemas computacionales para recoger todas las modificaciones de la Sexta Enmienda y adaptarlos a los nuevos requerimientos que entran en vigencia.