La Fiscalía Nacional Económica está realizando una profunda revisión a la industria portuaria en Chile, en el marco de la consulta que inició el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia por la licitación del megapuerto de San Antonio.

El proceso en desarrollo busca conocer las condiciones en que se realizará la licitación del proyecto, y podría dejar fuera a los operadores portuarios Matte, Von Appen y Luksic, debido a restricciones por eventual abuso de posición dominante.

A través de un oficio reservado, firmado por el Jefe de la División de Antimonopolios, Gastón Palmucci, se exige a los gerentes generales de los principales terminales portuarios una serie de antecedentes sobre la operación.

Además, la FNE indaga en la relación de propiedad que mantienen los puertos, por lo que solicitó a los ejecutivos del sector adjuntar la malla societaria de la concesionaria en la que se identifiquen sus actuales accionistas, con sus respectivas participaciones directas e indirectas en el capital, en las utilidades y derechos a voto, y sus personas relacionadas.

Las condiciones de competencia portuaria en cada región en que operan también deberán ser explicadas, así como los cambios en la situación competitiva que hayan implicado redireccionar parte de la carga movilizada desde el puerto a otros terminales. El objetivo es que la firma detalle las razones, los puertos de destino, y la relevancia de la carga que se ha redireccionado, según tipo de carga y toneladas.

Los expertos consultados aseguran que en la industria miran con atención el proceso de consulta del TDLC por el megapuerto, ya que no sólo se trata de un proyecto a gran escala, sino que también implica todas las carreteras y el tren. Ello, debido a que a futuro viene también una ampliación de las Rutas 68 y 78.