Un aumento de casi un 23% en la movilización de carga aérea ha generado que las instalaciones actuales de aeropuerto se vean muy exigidas. La causa obedece al crecimiento de las exportaciones, más de un 37% los seis primeros meses del año. Las importaciones, en cambio, si bien también incrementaron su volumen, este solo alcanzó a un 3,5% en este mismo periodo.

El gran responsable del aumento exponencial de los embarques es el salmón, que, con sus envíos a EEUU y Asia, barrió con todos los récords anteriores.

Las nuevas dependencias del aeropuerto –que se encuentran en construcción– no contemplan aumentos significativos en los espacios para la movilización de carga, situación preocupante pues, de seguir las últimas tendencias, se puede llegar a un colapso con desastrosas consecuencias.

Además, lo ideal sería el ingreso de más operadores, para mejorar las condiciones de libre competencia.