EDICIÓN NÚMERO 309 MAYO 2024

cerezas291

Es una realidad que como consecuencia de la Pandemia se produjo un desmejoramiento en todas las actividades económicas y este deterioro se hizo sentir con mucha fuerza en el movimiento portuario. En el caso de las importaciones, los tiempos se triplicaron y los importadores se tuvieron que resignar a que sus productos, una vez descargados, pudieran permanecer hasta 10 días a la espera de su retiro de zona primaria. Además de la Pandemia, el 2021 con el exceso de liquidez que significaron los retiros de los 10% más las ayudas del gobierno, se produjo una avalancha de importaciones y muchos rubros se quedaron sin existencias, ello ante los ansiosos compradores que presionaban la demanda de bienes a niveles sin precedentes. Los barcos triplicaron el número de contenedores que traían a puertos chilenos, lo que colapsó el sistema portuario. La guinda de la torta fue el exponencial aumento en los precios de los fletes marítimos y la reducción de los días para devolver los contenedores una vez desocupados. Tuvimos el 2021, por tanto, la tormenta perfecta con violentos aumentos en los costos de las importaciones y un deterioro nunca visto en la fluidez portuaria y de los otros servicios intervinientes.

Las exportaciones, por su parte, también vieron afectadas sus operaciones y se produjeron atoches, cambios de naves, escasez de disponibilidad de contenedores y demoras en la ejecución de inspecciones que tuvieron efectos nocivos en los productos, sobre todo en los perecibles, y muchos de los cuales llegaron a destino no en óptima condición para su comercialización.

Por esta razón, los distintos gremios que intervienen en la cadena logística, con el protagonismo de la Asociación de Exportadores (ASOEX) –entidad que agrupa a los fruteros– se han coordinado para plantear a las autoridades algunas medidas para que sean implementadas en la próxima temporada de frutas y que puedan darle una mayor fluidez al proceso de embarque.

Estos gremios agrupados plantearon 12 iniciativas que pretenden paliar los inconvenientes en los puertos que está enfrentando el país, propuestas que se relacionan con aumentar el personal del SAG y Aduanas; flexibilizar y uniformar los protocolos relacionados con el COVID; mejorar la operación al interior de los terminales portuarios; implementar el tercer turno para el retiro de los contenedores vacíos; que otros puertos se incluyan en los que puedan embarcar fruta, tal como el Espigón de Valparaíso, Puerto Ventanas y Coronel; que Aduanas reduzca los tiempos de contenedores que permanecen rezagados y que ocupan espacio que es necesario para acopiar carga de exportación (se puede disponer de un lugar de acopio y espera para camiones); y por último, agilizar la regularización de los documentos de choferes extranjeros que puedan conducir camiones de forma de aumentar la disponibilidad.