EDICIÓN NÚMERO 309 MAYO 2024

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En el número anterior dimos cuenta de los graves problemas que ocurrieron el mes de noviembre con la plataforma de Aduanas para la transmisión de sus operaciones, cuyo momento mas álgido fue el 20 de noviembre, día en que prácticamente no se pudieron realizar transacciones, lo que produjo un verdadero caos en las agencias. Los días siguientes la situación comenzó a mejorar y se retomaron las transacciones, con demoras, intermitencias, sin embargo, se pudo salir adelante sin graves consecuencias.

El mes de diciembre, por su parte, las intermitencias y demoras se mantuvieron durante la primera quincena; en todo caso, no fue impedimento para salir adelante con las tareas diarias y no afectó la fluidez de las importaciones y exportaciones. La segunda parte del mes, y hasta donde podemos apreciar al momento de escribir estas líneas, la tendencia es a una normalización de la plataforma, lo que nos tiene a todos bastante más tranquilos.

De este preocupante episodio hemos sacado lecciones. La primera es que las tres vías que existen para la transmisión con Aduanas deben estar plenamente operativas y el flujo de transmisiones debe ser repartido en forma regular por estos medios. El grueso de los envíos electrónicos a Aduanas se efectúa por la VAN, vía que concentra mayoritariamente las operaciones. El otro medio, Web Service, si bien debiese estar siempre operativo, al no utilizarse frecuentemente presentó dificultades al momento que recibió un considerable aumento de transacciones, lo que fue siendo corregido durante el correr de los días. La tercera opción es SICEX, que estaba disponible y funcionando, pero que también tuvo problemas al utilizarse en forma masiva en esos días críticos de noviembre.

El otro factor que nos enseñó este periodo difícil es que hay que replantear los recursos de que dispone Aduanas para tecnología. No puede ser que este Servicio, que es vital para manejar el comercio exterior chileno, deba prácticamente rogar a Hacienda por mayores recursos para actualizar y modernizar su equipamiento y software. En el corto plazo, Aduanas debería enfocarse a mantener las 3 vías de transmisión operativas, de manera de tener alternativas ante alguna contingencia futura.

En lo que a las agencias aduaneras respecta, también ha quedado en evidencia que tenemos tareas imprescindibles que abordar para poder enfrentar cualquier eventualidad futura. Nos referimos a que es indispensable mantener y utilizar a diario todas las vías de transmisión, única forma de garantizar a los usuarios finales una continuidad en la interacción con Aduanas.