Edmundo Browne V.

Al hacer un resumen del 2018 hay algunos aspectos dentro del ámbito de comex que son dignos de destacar. En primer término, el avance del SICEX, que sigue su marcha y esta plataforma ya puede mostrar números alegres en cuanto al volumen de exportaciones gestionadas por esta vía. Los otros organismos integrados y operando ya con SICEX son Sernapesca y el ISP, que está afinando las etapas finales. Los servicios que aún necesitan avances significativos para su integración son el SAG y el SEREMI. En el caso de las importaciones, durante el 2018 se realizaron tramitaciones parciales; sin embargo, su gestión a través de SICEX todavía está en desarrollo y se espera que este 2019 se dé el impulso definitivo para concluir con esta tarea iniciada el 2010.

El otro tema que tomó vuelo el 2018 fue el programa de Operador Económico Autorizado (OEA), al que Aduanas le puso mucha fuerza; ya se encuentran en etapa de validación varios operadores que integran la cadena logística. Como se sabe, en la primera etapa el reconocimiento como OEA se encuentra restringido solo a los exportadores y agentes de aduana; en todo caso existe bastante presión de parte de los importadores para que sean incorporados a este programa, que consiste en generar una cadena de seguridad de operadores en la secuencia de actividades de la logística internacional.

En el mundo privado, se puede mencionar que el comercio internacional se incrementó y el caso más sorprendente fue el de los salmones, pues superaron la barrera de los US$ 5 mil millones en exportaciones, cifra impensada hasta hace unos pocos años. El rubro se encuentra muy optimista y piensan que este año la racha salmonera debería continuar, pues no se divisan amenazas que pudieran opacar el futuro inmediato. El otro rubro que también bordeó los US$ 1.000 millones en embarques fueron las cerezas, cantidades que ni el más optimista predijo hace solo algunos años. Lo mismo ocurre con los arándanos, que siguen consolidándose año a año.

Es por ello que el sector de exportadores de alimentos se ha puesto metas muy interesantes para los próximos cinco años, y pretende alcanzar los US$ 32.000 millones en ventas al exterior para el 2025. Así lo manifestó el Comité de Exportadores de la SOFOFA hace algunos días, lo que refleja el buen momento por el que pasa este rubro y la confianza en las buenas perspectivas que se vaticinan.