EDICIÓN NÚMERO 309 MAYO 2024

Sergio Cabezas

Más de alguna polémica provocó un aviso que enviamos hace algunos días a nuestros clientes, dando cuenta de que hace varias semanas el proceso de retiro de cargas de importación se había visto afectado por prolongadas demoras que en general estos no comprendían y que les afectaba enormemente, no sólo por la necesidad de contar con sus productos, sino también por los altos costos que debían asumir por estas demoras.

En términos prácticos y a modo de ejemplo, un contenedor que se retiraba de puerto 2 días después de la llegada del barco, hoy se puede llegar a retirar una semana después.

En el caso de los barcos que transportan vehículos, las esperas han sido aún más prolongadas llegando al hecho excepcional de que naves esperen sitio para atracar (“a la gira”) por más de 20 días. Según los ejecutivos de DP World en San Antonio, la descarga de los vehículos debería normalizarse durante el mes de abril.

En nuestra opinión, uno de los factores más importante había sido la eliminación del tercer turno de las labores de los terminales portuarios, ya que anteriormente los puertos trabajaban 3 turnos de 8 horas cada uno, y hoy en día eso se ha reducido a solo 2. Desde nuestra perspectiva, esto por sí mismo justificaba en gran medida los tiempos adicionales. A esto había que sumarle que, según informaciones de prensa, un número importante de trabajadores portuarios estaba en teletrabajo y otra cantidad similar con licencia médica a causa de la Pandemia.

A raíz de este aviso, autoridades portuarias han salido a defenderse argumentando que, si bien es efectivo que el tercer turno se había eliminado, esto obedecía a un requerimiento del gremio de los transportistas que, producto del gran aumento de robos e ilícitos en la ruta y por la seguridad de sus conductores y de la carga, preferían no transitar de noche.

Al cierre de estas líneas se había programado una reunión de trabajo con gremios portuarios, importadores y representantes del transporte a fin de buscar una solución a esta situación y ver la forma de agilizar el retiro de cargas, en especial desde el puerto de San Antonio, que tiene a los importadores con quiebres de stock en momentos en que el país vive tiempos muy complicados.